viernes, 12 de enero de 2007

a mí no me hacen falta sardinas para beber agua

Hoy me he levantado un poquito cabrón. No sé si es la falta de sueño o el frío, pero me noto el estómago repuntao*, como diría mi madre. Esa sensación de querer hacer el mal (así en pequeñito). Hacer pequeñas putadas (no ceder el paso a alguien que se incorpora a la M-30, pisar "sin querer" a un perro que se me acerca, contestar mal a una señora que se intenta colar en el supermercado,...). Porque noto que lo que me apetece es empezar una buena bronca, una bronca de esas que te vas encendiendo poco a poco, que llega a lo más alto y al terminar, después de haberlo soltado todo, respiras hondo y te notas completamente relajado. Si os fijáis, una buena bronca se diferencia poco de un buen polvo.
Por eso, si hoy os cruzáis conmigo en la calle, sabed que de las dos posibilidades (bronca y polvo) sólo vais a tener una opción (la otra la tiene en exclusividad mi señora). Así que be careful, my friend**, que hoy estoy muy loco.


*Dicho del vino: Empezar a volverse, tener punta de vinagre. // coloq. Dicho de una persona: Desazonarse, indisponerse levemente con otra. (N. del A. ) Fuente RAE
**cuidadito conmigo (N. del T.)

1 Comments:

Blogger Ilse said...

Si me lo dices antes habíamos quedado y hubiéramos tenido una bien gorda, que yo llevo unos días de una mala hostiaaaaa. Conmigo ya sabes, "No me toques las palmas, que me conozco"

Ilse, alias "chicken queen"*

*N del T: La reina de los pollos (que no lapos)

12 de enero de 2007, 22:54

 

Publicar un comentario

<< Home